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Diario de Método

La fecha es confusa.
Si los días aquí pasan como allá en casa, debemos estar a 30 de Noiju.
El tiempo pasa más lento.
Tener el mismo paraje a la vista todo el tiempo no ayuda a la diversidad.
Los muchachos se divierten con los hombres del Comandante.
Bromean mucho, especialmente en los fogones nocturnos. No participo mucho de ellos, no me siento cómodo alrededor de mucha gente. Es bueno que rían, particularmente después de la última incursión. Iximar probó ser un territorio más hostil de lo que nuestro Comandante creía. Admito que tengo mis dudas acerca de su experiencia militar, pero no seré yo quién rete su mando.
Este diario se probará útil una y otra vez.
La manera de volver a casa me elude, como la liebre que escapa de los perros de caza.
Tal vez no esté intentando lo suficiente.
El porqué detrás de mis intentos fallidos, corre a la par de nuestro escape de estas tierras.
Debo levantar el paso, urgentemente.

Esto de Método, surgió de un pedazo de texto que escribí para una amiga, y me terminó gustando de que iba. De vez en cuando, me pongo a pensar en esta clase de texto... y en lo lejano que esta de "Nate River..." y de las cosas de la novela en sí.
Y me divierte =D

Saludos,
Nate